En el salón de los pareceres:
hay espejos mentirosos,
telarañas perezosas,
que cuelgan de las lámparas de madera
carcomida.
Los muebles son color vela,
así iluminan.
Se alargan los dedos, mienten las caras,
las sombras son compañía.
Las hormigas son vecinas,
las ilusiones elixir de fantasía.
La música es lejanía.
La risa es traicionera, de uno se ríe ella.
Los segundos pasan despácio, minutos no hay,
Todo son pareceres...
No hay comentarios:
Publicar un comentario